El caqui es una fruta de tropical francamente deliciosa. Es característico su color naranja tirando, incluso, a rojo. Es originario de Japón y lo que llama la atención de esta fruta, es también la textura gelatinosa de su pulpa.
También es conocido como palo santo. El pérsimon, es de la familia del caqui, pero duro.
Cuenta con importantes propiedades nutritivas, sobre todo por su alto contenido en fibra que puede ser un aliado en los momentos de estreñimiento durante el embarazo.
¿Se puede comer caqui si estoy embarazada?
En principio, no hay ningún problema en comer caqui durante el embarazo.
Las únicas cosas que tienes que tener en cuenta es que, como cualquier alimento, su consumo en exceso puede no estar recomendado.
El caqui tiene un alto contenido nutricional y puede ser un gran aliado para la alimentación de las embarazadas. Cuenta, entre otras cosas, con un gran aporte de provitamina A, que posteriormente se convierte en Vitamina A. Esto hace promueve un buen estado de los huesos, piel, cabello, mucosas, así como para un correcto funcionamiento del sistema inmunológico.
Estos beneficios, al final se transfieren al bebé, porque un buen estado de salud del o la bebé. Pero ello no significa que, un consumo excesivo puede ser perjudicial por su alto contenido en azúcar.
Por eso, como todo, con moderación siempre es mucho mejor.
Si tienes antojo de caqui durante el embarazo, puedes comerlo sin problema, pero con moderación. Porque también, a veces es comer o probar algo un poco que estar todo el día con ese antojo sin satisfacer.
No olvides que, en caso de tener alguna duda, consulta con tu ginecólogo/a, que seguro te resolverán aquello que te pueda preocupar.