La alimentación juega un papel importante en el bienestar de todas las personas, pero toma mayor importancia en el cuidado y la salud de las mujeres embarazadas.
Las frutas son alimentos que se recomienda que estén presentes en todas las dietas gracias a sus altos contenidos de vitaminas, minerales, fibra y azúcares de origen natural.
Con la llegada del verano, una de las frutas que automáticamente sale a la palestra es el melón (o la sandía), debido a su alto porcentaje de agua y frescura, pero no solo por eso, sino también por todos los beneficios que esta fruta aporta, especialmente a las embarazadas. Vayamos al grano y mencionemos las virtudes de esta deliciosa fruta veraniega.
¿Por qué es bueno comer melón durante el embarazo?
En el verano muchas personas buscan el melón, ya que está constituido en un 90% por agua, lo que ayuda a mantener el cuerpo hidratado, pero sus principales bondades tienen que ver más con lo que ocurre al consumirlo durante el embarazo.
Aunado su alto contenido de agua y a que colabora con la hidratación, también es una fruta rica en ácido fólico, lo que coadyuva a la correcta formación del tubo neural del bebé y su desarrollo cognitivo y también previene ciertas enfermedades cardiovasculares, alzheimer y ciertos tipos de depresión.
Contiene niveles elevados de vitamina A y C, las cuales previenen la anemia, fortalecen los huesos, mejoran la visión y ayudan a la formación de tejidos blandos y óseos.
Además, contiene citrulina, que es un aminoácido no esencial que ayuda a fortalecer el sistema inmunológico y favorece a la cicatrización de las heridas.
Sus semillas son ricas en omega 3, el cual es una grasa poliinsaturada que provoca que el feto tenga un adecuado desarrollo cerebral. De igual forma, su consumo posterior brinda una buena coordinación motriz en los bebésy ayuda a mejorar la concentración de los niños. Además, contiene diversos minerales que ayudan al desarrollo adecuado del feto, como lo son potasio, magnesio, calcio y hierro.
Y no solo es beneficioso para la formación del bebé, también tiene beneficios para la madre, entre los cuales podemos encontrar que, al ser rico en fibra, facilita el proceso de digestión, por lo que evita el estreñimiento y las hemorroides. Por último, tiene propiedades diuréticas, por lo que ayuda a eliminar las toxinas del cuerpo y previene la retención de líquidos y los consecuentes edemas.
¿Qué cuidado debes tener antes de incluir el melón en tu dieta si estás embarazada?
Si se suelen tener problemas digestivos, como la dispepsia, no es recomendable ingerir melón en grandes cantidades, pues puede producir pesadez, cólicos y diarrea si la persona no está acostumbrada a consumirlo de manera regular.
De igual manera, el melón tiene un alto contenido de azúcar, por lo que si se padece de diabetes gestacional no es recomendable su consumo. Es deber de todas las futuras madres consultar con los especialistaspara saber si pueden consumir o no ciertos alimentos.